La terapia de pareja ha sido de gran ayuda para bastantes personas y ayudado a que sean más felices en las relaciones que tienen. Aunque, como nos dicen animuspsicologia.com desde su experiencia, es cierto que puede ser algo estigmatizado y no muy bien visto, los beneficios de poder acudir a terapia de pareja son innumerables.
Vamos a darte cinco motivos:
¿Qué es y para qué sirve la terapia de pareja?
Estamos ante una atención psicológica que da el psicoterapeuta a la pareja. Con ello posibilita ayudar a muchas personas a que vayan gestionando las emociones y soluciones conflictos con actitudes de lo más maduras, puesto que puede mejorar la convivencia a diario.
Problemas de comunicación
Este es un problema habitual entre las parejas, especialmente las jóvenes. Esto puede acabar acarreando problemas de gravedad. Para ello, la terapia de pareja puede ser una solución de lo más efectiva.
Pérdida de la confianza
Los celos y la pérdida de confianza son un problema bastante importante y que aparece por las inseguridades. Este es de los problemas que más se producen, por las redes sociales, especialmente.
El caso es que, se puede mejorar mediante conversaciones y ejercicios de psicoterapia de pareja.
Planes de futuro bastante distinto
Este es un problema donde cada miembro de la pareja en un momento dado, quieren tomar un camino diferente. Desde dónde quieren vivir, el estilo de vida o tener o no hijos. Si todavía quieren estar juntos, el psicoterapeuta puede ayudarles a que vean la vida desde la perspectiva de la otra persona y que se puedan unir entre ellos.
La rutina se les hace monótona
Otro problema es la monotonía que puede hacer que no encuentres sentido a tus días. Aquí se pueden hacer ejercicios que les saquen de la zona de confort. Las rutinas como tal son precisas y no son negativas, pero hay que encontrar una serie de momentos de desconexión, de hacer cosas diferentes y de estar juntos.
La convivencia se ha hecho pesada
Cuando se tienen una serie de problemas complicados y la convivencia se hace verdaderamente pesada, la terapia de pareja es buena opción. No olvidemos que la convivencia es bastante compleja.
Puede llegar a surgir lo peor de cada persona. El caso es que la terapia es ideal para ello. Como te has podido dar cuenta, la terapia es ideal para ello. Como has podido llegar a notar, es de gran ayuda para solucionar bastantes problemas en la relación. Si los miembros están dispuestos a ello, el profesional de la psicología les puede ayudar.
Ventajas importantes
Entre ellas, debemos tener claro que la terapia les puede servir de gran ayuda para solucionar todos los problemas que pueda haber. Vamos a verlas:
- Va a mejorar la confianza en una mismo y de la propia pareja.
- Se va a perder el miedo a poder expresar sentimientos, preocupaciones o emociones.
- Ayuda a las crisis que pueden ser puntuales y que de no tratarse se pueden agravar.
- Se cuenta con el punto de vista de una tercera persona que no juzga ni se entromete
- Te puedes dar cuenta de si la pareja que tienes es el amor de tu vida
- Vas a poder conocer mucho mejor a la otra persona
- Podrás conocer problemas desconocidos que estaban en un segundo plano
- Encuentras soluciones ante los problemas o imprevistos como la relación.
Cómo llegar a ser terapeuta de pareja
Pensemos que estos profesionales de la terapia son unas personas que tienen el grado universitario en Psicología. Esto es importante para conseguir las bases del conocimiento que son precisas para servir de ayuda en las parejas.
De la misma forma, lo más normal es hacer un máster o un curso formativo que está especializado en Terapia de Pareja.
Conclusiones
Después de todo esto que hemos estado contando, hay que tener en cuenta que es necesario pensar en las terapias de pareja como una forma de poder afrontar esos problemas que algunos más evidentes y otras no tanto, pueden hacer mella en una pareja con el paso del tiempo.
Por todo ello, creemos que es importante y que hay que animarse bastante para que así podamos “mojarnos” y que demos ese paso de poder ir más allá y que la gente tome la decisión de poder acudir y luchar por la relación.
Cuando la pareja no quiera ir a terapia quizá haya bastantes posibilidades de que una o las dos personas no quieran salvar la relación, porque no van a querer solventar los problemas que tengan en este sentido.
