A la hora de la decoración de la casa o amueblarla, es cierto que muchos aprovechan el volver de vacaciones para dar un nuevo aire a la casa. En otros casos se compra o alquila una vivienda.
Todos estos momentos son muy adecuados para ir dando forma a la casa, que es una tarea que es posible que sea complicada, pero que a la vez es bastante agradecida, pues se pasa de transformar un espacio impersonal a sentirse bien, Lo primero que debemos tomar según los especialistas en muebles de Dismobel, que tienen una dilatada experiencia en muebles, es tener una visión en lo global, para que todo siga una misma línea.
Vamos con una serie de trucos para la decoración de tu casa:
Revisión del estado de la casa
Lo primero que hay que hacer antes de decorar o distribuir, es hacer una revisión del estado de los suelos, la pintura, la carpintería o de las instalaciones y equipos. Debemos mirar si hay rayas, manchas, humedades y también que las instalaciones estén en óptimo estado.
Tenemos que ser conscientes del presupuesto
En cuanto se toma la decisión de abordar una obra, tenemos que cerrar el presupuesto. Todo este presupuesto variará según las posibilidades existentes y las necesidades. No es el mismo caso el de una persona que precisa de una reforma integral que la de otra que necesita licencias o la ayuda de un profesional que solo desea redecorar. Tenemos que pensar que casi seguro que van a aparecer cosas nuevas para comprar, por lo que te recomendamos tener un margen del 10% o 15% para estos casos.
Planificación del espacio
Debe medirse cada estancia de la casa para poder ver lo que encaja y lo que no en el espacio de la casa. Es obligatorio tener en cuenta varios factores, desde la amplitud, a la orientación o la iluminación. En base a todo esto y otros factores, es donde tenemos que tomar decisiones con lo que contemos. Lo mejor es recurrir a un planificador o a un plano a escala.
Iluminación de las habitaciones
Una buena iluminación es interesante para hacer las tareas del día a día en cada habitación. Esto hace que antes de que empecemos con la decoración se deban planificar los puntos existentes de luz.
¿Qué estilo llevará la vivienda finalmente?
Existen muchos estilos, pero cuando se elige, hay que optar por el que mejor vaya con tu personalidad. Lo ideal es que se lleve a todas las habitaciones, pudiendo optar también por otro estilo que lo acompañe, pero que sea complementario.
No obstante, hay que tener cierto cuidado a la hora de elegir el mobiliario y demás elementos, puesto que mezclar bastante, es posible que nos dé una sensación agobiante.
Elección de los colores
Otro paso importante es seleccionar los colores de las paredes, techos o suelos. Dependiendo del estilo, deberás optar por un determinado tipo de tonalidades.
Decoración de la cocina y los baños
Contamos con dos opciones a la hora de abordar la cocina y los baños, o se reforman o se personalizan. El hacer la obra va a depender de las ganas que tengas y de tu presupuesto. En las viviendas de segunda mano la sustitución de sanitarios y demás mobiliario suele ser frecuente, pero en la obra nueva, bastará con la redecoración del espacio gracias al uso de complementos como son los textiles y accesorios de todo tipo.
Selección del mobiliario
Cuando amueblamos, es importante aplicar la famosa máxima de “menos es más”. Si colocamos muchos muebles es posible que provoquemos sin querer la sensación de agobio. Lo mejor es ir amueblando primeramente las piezas fundamentales para nuestro día a día, para después proceder a amueblar las diferentes estancias, siempre teniendo en cuenta el espacio disponible. Tenemos que tener en cuenta, eso sí, nuestro presupuesto.
Decisión sobre los complementos
Los complementos dan esos toques de colores, que dan calidez y color. Esto podemos verlo en las cortinas, alfombras, cojines o la ropa de cama. Para ello lo que tenemos que tener en cuenta son los que más vayan con nuestro estilo y los colores de las habitaciones.
Personalización del hogar
Personalizar es lo último, aquí hay sitio para las fotografías de familia, cuadros, souvenirs de viajes, etc. Tenemos que sentir que cada vez que entramos en casa, podamos sentir que no existe un sitio mejor.