Por suerte hemos abierto la mente para muchas cosas. España ha dejado de ser ese país retrasado, con ideas de la prehistoria donde parece que todo lo que eran problemas mentales estaba mal visto. ¿Cuántas veces hemos oído hablar peyorativamente de la profesión del psicólogo? “Yo a un loquero no voy” “Eso es para los que están mal de la cabeza” “Yo no voy a un comecabezas”. Lamentables frases que demostraban que se conoce muy poco de la profesión. Y es que son muchas las personas que todavía no te saben diferenciar entre psicólogo y siquiatra.
Pues bien, hoy te queremos hablar de la profesión de psicólogo y de las razones que hay para poder acudir a uno de ellos. Ahora bien, no tiene que ser por un problema en concreto, al igual que vas de vez en cuando al médico, aunque no te duela nada. La profesión de sicólogo también está para poder ayudarte y prevenir posibles quebraderos de cabeza. Llamamos a la puerta de la psicólogo de Valladolid Vanessa Sanz, para que nos siga abriendo los ojos sobre esta bonita y efectiva profesión.
Beneficios de ir al psicólogo
En lo personal: A día de hoy, es normal que vivamos periodos de tristeza. Sin embargo, hay ocasiones en que esta tristeza se alarga en el tiempo o se convierte en depresión. Y durante estos meses que hemos vivido durante la pandemia del coronavirus, han aumentado todos los casos. Es ahí donde es importante comenzar tu tratamiento para la depresión con un profesional especializado.
En las parejas: Es normal que las parejas con problemas tengan más dificultad para expresar sus necesidades. Es muy importante la comunicación para expresar los sentimientos, aunque no siempre somos capaces. Esto a su vez hace que sea un reto poder resolver los conflictos de mutuo acuerdo. Por ello, la psicóloga Vanessa Sanz entiende que hay grandes retos que las parejas tienen que superar con la ayuda de un profesional. En la terapia de pareja se crea un ambiente íntimo donde las dos partes pueden expresar sus sentimientos, abrirse y mostrar sus necesidades en un ambiente seguro y controlado. El papel del terapeuta es ser un facilitador y guía para crear un diálogo entre la pareja y poder ver las emociones más allá de los patrones negativos.
En familia. Los problemas no vienen solos, suelen hacerlo en familia. Por este motivo, mantener una relación de familia a largo plazo puede ser complicado y que surjan problemas sobre los que intervenir. Problemas de comunicación con los hijos, desacuerdos en toma de decisiones, problemas con las notas del colegio, con las salidas con los amigos o adecuar la economía familiar al momento que estamos viviendo.
Otras terapias. Hay personas que utilizan la terapia como apoyo ante dificultades concretas y otras como vía de conocimiento personal. Por ejemplo, desde el gabinete sicológico nos animan a ir cuando sintamos que no avanzamos, que estamos bloqueados. Cuando tus problemas no te dejan disfrutar de la vida o cuando tienes síntomas que no entiendes como angustia, ansiedad, depresión, etc.
Así son los terapias
Las terapias ofrecidas por Vanessa Sanz están enmarcadas dentro del modelo cognitivo-conductual, avalado científicamente. El modelo cognitivo conductual es la base de la metodológica, pero apoyado por la idea de una intervención ecléctica que permita ajustar la intervención a la individualidad de cada uno de los pacientes.
La terapia cognitivo-conductual es una forma de tratamiento a corto plazo que se centra en los síntomas presentes y en la resolución de los problemas actuales del paciente. Terapeuta y paciente trabajan de forma conjunta para modificar pensamientos, comportamientos, emociones e interacciones sociales que le generan malestar por otros más adaptados a su realidad.
Durante las primeras sesiones, los profesionales intentan recopilar información suficiente sobre los problemas o dificultades que hacen acudir a consulta: cuándo ha comenzado, como se ha formado, el por qué se mantiene en la actualidad y las razones por las qué no se es capaz de solucionarlo por sí mismo.
Posteriormente se intervendrá con las técnicas más apropiadas para cada paciente considerando su individualidad. Así es paciente irá adquiriendo una serie de herramientas que les facilite afrontar el problema actual y tener recursos ante dificultades que se puedan presentar en el futuro.
Y es que como dice la famosa frase: “No siempre puedes tú solo, no tienes por qué saber de todo”. Por este motivo tienes que apoyarte en profesionales. No lo dudes más y se notas que tu cabeza no fluye, lo mejor es que te dejes ayudar.